jueves

aire

La felicidad se esconde solo a tres respiraciones
más allá, más acá, en ese maldito punto que nunca encuentro...
los vecinos chillan, las molduras pesan
los enchufes quieren arrancarse de la pared
para verme llorar de cerca con curiosidad de simio...
no me diferencio tanto de un objeto

Pero siempre soy yo, la perfección de todo lo creado
el mago del milenio de oro, el que dibujó con vísceras en las grutas oscuras
y pixelizó la realidad desde una pantalla cristalina
el que puede cantar con el golpe de los zapatos
o recopilar el saber humano en un minúsculo silicio

siempre soy yo, quien pisó la luna por instinto
y bombardeó las capitales enemigas
el que ordenó a todos matarse por su diferencia
el que ordenó a todos amarse por su diferencia
el eslabón más elevado, la madre de todas las probetas

el rey de todas las patrañas, aquel al que la realidad no controla más.

YO NO ME LLAMO JAVIER




En el Museo de las Relaciones Rotas,

donde la gente dona toda clase de objetos

que pertenecieron a sus antiguas parejas

y que se exhiben en torno al concepto

de relaciones frustradas y sus ruinas, según explica

el anuncio, encontré aquella jirafita que te regalé.

La encontré con una pequeña nota, una tarjeta

doblada en dos atravesada por un cordón dorado

que le colgaba del cuello. En esas tres líneas

de despedida pude reconocer tu letra.

Lo que no pude –y dudo de que pueda algún día–

es adivinar quién diablos es Javier

miércoles

EL MUSEO DEL OBJETO DEL OBJETO

Después de llorar incansablemente, de haber tomado ese avión para reencontrarte, de hacer y deshacer; de cortarte el cabello, de quedarte sin palabras y con todas ellas en los puños; después de creer en desconocidos, de sentirte culpable. Después de aquella fatídica navidad, de los mensajes en el espejo, de las cartas. Después de los platos rotos, de las camas vacías y los calcetines perdidos; de las casas que dejaste, de las rutas cambiadas. Después de las malas decisiones, de las llamadas perdidas, del olor a muerte y flores. Después de los déjà-vu que dan miedo, del gato que duerme y no se entera de cómo se está rompiendo y recuperando tu corazón, tu alma, tú. Después de todo, sólo quedas tú.

¿Quién no ha sentido eso?




Tener una relación rota no sólo significa haber terminado una relación amorosa, sino simplemente haber terminado un vínculo emocional con alguien. A veces cuando ésto sucede, no dejamos ir a la persona y queremos atarnos al pasado, porque creemos que así podemos seguir caminando, así que tomamos de bastón cualquier objeto que represente la relación. Definitivamente ésto no es nada bueno, porque vivimos en una mentira, en un vacío constante.





Para comenzar a vivir sin bastón, hay que soltarlo. No hay más, suéltalo, no lo guardes "por si lo vuelves a ocupar", simplemente déjalo caer y no te sostengas de una maceta, de otra persona o de tus mascotas, sólo mantienes tus pies en el suelo y das un paso, seguido de otro un poquito más largo, después harás los movimientos más rápido y cuando menos te lo esperes estarás corriendo, sintiendo el viento en tu cara y el alivio en tu vida. No será fácil, pero la recompensa lo vale completamente.







Suéltate, hay un montón de personas que ya lo hicieron y para muestra no un botón, sino un museo completo: Brokenships.

lunes

Tú, tú que me hiciste reír

Es interesante emocionarse, como una descarga de adrenalina que sube por tu espina dorsal hasta apoderarse de tu cerebro. Puede ser por distintas razones; por trabajo, uff cuando te ofrecen un mejor puesto, un aumento o ya mínimo que te paguen a tiempo.

Oh alguien nueva en tu vida, justo cuando estabas a punto de perder la fe en la humanidad, esa personita que te contagia y hace reír y te hace querer correr hasta empezar a volar.

Hay tantas cosas por las cuales quejarse en está vida, pero si perdemos el tiempo en ellas, dejamos de lado las que realmente importan. Ya se que suena como libro de superación personal y que aunque suene filosófica la frase, es algo que todos sabemos, ni que estuviéramos mensos.

Lo se yo, lo sabes tu, lo sabemos todos, no te enfoques en lo negativo, y cuando sientas que lo haces, esfuérzate, detente deja de pensar en todo y respira. El solo vaciar la mente de todo lo que quieres o no tienes o esta mal, te permite llenarla de todo lo que si tienes y va bien, y cuando eso este en tu mente no lo dejes salir.

viernes

Miedo quien dijo miedo


Despertando de un sueño me he dado cuenta que hay muchas cosas a las que les temo, no solo a las mas obvias y letales, como una cucaracha radioactiva mutante, o como cuando iba por la calle pensando en mis pequeños dilemas cavilando sobre lo bella que es la vida y me encuentro a un hombreosocerdo y yo con cara de WTF y él "Hey dude whats up", y yo"aahhhhh", y el "aaaaggrrrrr" y yo"aahhhhh".

Y es que hay cosas que asustan a huevo que si, cosas donde uno no puede hacerse el valiente porque simplemente seria una falta de instinto de supervivencia cabron, pero que pasa con aquellas cosas mas subjetivas. Veamos lo así, el miedo es una respuesta evolutiva que nos permite mantenernos alejados de los depredadores (como el hombreosocerdo, el que no entienda vea southpark).

Pero hoy mas que nunca me di cuenta que le tengo mucho miedo a mis sueños, tonto, lo se!, sera acaso que mi sueño es un depredador nocturno que espera a que llegue mi vigilia para clavar sus filosos colmillos en mi mente. Ademas neta, como te defiendes de tus sueños, esta cabrón, aparte de estar cabron ya que te despiertas te das cuenta que lo único que hizo tu mente fue poner de manifiesto tus verdaderos miedos, como la impotencia, esa maldita incapacidad de responder ante un acto o situación de peligro.

O mis mas profundos defectos, como recordandome, "Que pedo man, no que los ibas a corregir". Y es que a un miedo no se le oculta abajo de las sabanas ni siquiera dentro de los sueños, a un miedo se le enfrenta

lunes

CAMINOS

Mucho, mucho tiempo sin escribir por aquí, así que empezare desde lo mas relevante.

El año pasado casi a principios llegue a un punto de inflexión en mi vida. Lo malo de estas situaciones no es que lleguen ni siquiera tomar decisiones para salir de esta, el punto clave es afrontar estas decisiones. Aun no creo ser capaz de abrirme con alguien ni siquiera con el limbo del internet para compartir que exactamente fue lo que me hizo llegar hasta ese extremo. Solo diré que un día desperté sin el mas mínimo interés por ver la noche. Supongo que me encontraba tan lleno que un desborde era inevitable y es que despertarse cada día esperando a que llegue la noche y empezar la semana deseando que avance lo suficientemente rápido para soportarla.

En ese precisó momento mi mente albergaba un solo pensamiento..... irme!, ¿a donde?, a donde fuera, no importaba así que en un solo día hice lo posible por juntar todo lo necesario para hacer eso posible. llegada la noche ya contaba con un pasaporte renovado, dinero suficiente para darle la vuelta al mundo y equipo para hacerlo caminando de ser necesario, empaque todo con extremo cuidado, limpie mi departamento y cerré la puerta detrás de mi.

El destino era incierto así como el tiempo que me llevaría estar en paz conmigo mismo. Lo único cierto era que si no lo hacia, si me quedaba y seguía sin hacer algo nada bueno saldría de eso. Unas horas despues estaba en una central de camiones, y en mi mente estaba el mar, dicen por ahí que todas las almas que necesitan sanar van en busca de agua, como si el destino estuviera grabado bajo instinto de supervivencia -cuando todo se desmorona, regresa a tu origen- y bien si yo no nací en el mar tambien es cierto que en la quietud de un lago mis pensamientos encuentran un lugar para volver a nacer y en la furia de un mar embravecido mi locura tiene suficiente espacio para disolverse sin destruir todo a su paso.

Así que playa será pensé, y playa fue. Estuve ahí solo lo necesario para vaciarme y una vez vació hubo la necesidad de llenarme de nuevo. Esto nunca trató de un epitafio o una despedida, fue volverme a encontrar.
Ya se que suena bastante estúpido viajar al otro lado del mundo para encontrarse cuando lo único necesario era verse al espejo, pero que haces cuando no reconoces tu propio reflejo, cuando en tus ojos ya no te encuentras. Describir lo que hice en tantos días y meses no es mi intención, solo recordarme lo que aprendí. Que del abismo mas profundo siempre se puede salir si en la inmensidad de la oscuridad que nos abruma podemos dislumbrar un poco de luz, seguramente no la suficiente para iluminar nuestra alma, pero la necesaria para volver a encontrar el camino.

Y como se regresa de algo así, pues de la misma manera en la que se parte, simplemente un día despiertas y te das cuenta que ya no hay necesidad de seguir caminando