martes

SUEÑOS INTRANSITABLES

ES RARO VOLVER A SER EXTRAÑOS, TENER QUE IRTE, EL TENER A QUIEN CONTARLE TODO EN EL MOMENTO EN EL QUE TE PASA
Y DE REPENTE NO... TODA TU VIDA CAMBIA

DEBES IGNORAR CIERTAS CANCIONES, OLORES E IMÁGENES QUE TE TRAEN RECUERDOS

SUPRIMIR SENSACIONES Y RECONSIDERAR TUS PLACERES
PUEDES TENER PAISAJES, SITUACIONES Y PERSONAS GENIALES ENFRENTE DE TI, Y TENER LA CABEZA EN OTRO LADO

A VECES CUANDO NO SUPERAMOS A ALGUIEN SE NOS OLVIDA QUE ESA PERSONA DECIDIÓ NO ESTAR CON NOSOTROS

OJALA LA VELOCIDAD PARA OLVIDAR FUERA TAN FÁCIL DE CALCULAR COMO DISTANCIA ENTRE TIEMPO
PERO EL DESAMOR NO ES UNA CIENCIA EXACTA

PERDEMOS UNA RELACIÓN POR FALTA DE TIEMPO
PERDEMOS POR MIEDO A PERDER
PERDEMOS POR ENCONTRARNOS A NOSOTROS MISMOS

DURANTE UN ROMPIMIENTO HASTA LA ESPERANZA DUELE
LA ESPERANZA DE HABER COMETIDO UN ERROR AL TERMINAR
LA ESPERANZA DUELE PORQUE ESTA SE VUELVE UNA SIMPLE DUDA
Y TERMINA EN UN SILENCIO INCOMODO EL CUAL PODRÍA DURAR TODA LA VIDA

UN TE EXTRAÑO ES UNA BOMBA SIN USAR
EL DOLOR DE UN CORAZÓN ROTO NO SE DISTINGUE ENTRE PAÍSES
CUALQUIER PERSONA, NO IMPORTA NIVEL SOCIOECONÓMICO
RAZA O RELIGIÓN, HASTA EPOCA
SE PODRÍA IDENTIFICAR CON ESTE TIPO DE DOLOR TAN ESPECIFICO

UN CORAZÓN ROTO, DE LOS QUE PESA MUCHO Y CONFUNDE
CON EL CUAL LOS SENTIMIENTOS NO SE PUEDEN RECICLAR
PERO TAMPOCO SON DESECHABLES
NADA MAS MIEDO QUE LA POSIBILIDAD QUE UN ADIÓS SEA EL ULTIMO

PERO PORQUE CATALOGAR UNA RELACIÓN COMO UN ERROR
CUANDO ES SOLO UNA HISTORIA QUE NOS ACERCA A LA ÚNICO SOLUCIÓN PARA NUESTRA MORTALIDAD
A LO ÚNICO QUE NOS HACE SENTIR SALVADOS
EL AMOR!

viernes

Decálogo inútil para afrontar la vida




1. Ríase con la boca abierta. Reflexione un poco, eche la vista atrás y dígame que no es para reírse: el anuncio de las reformas en medio del mundial, el uso de armas en contra de las manifestaciones (pueblamentable); la privatización de la industria energética (¿ven como no es tan difícil lograr el consenso en política?.. para algunas cosas); pasamos de los diputables a diputados con aren propio, un estado endeudado por una rueda de la fortuna gigante [...]





2. Lea un poco, aunque sean las etiquetas del Súper. Así no comprará más pan Bimbo caducado. Lleve siempre un libro encima:
1) le ayudará a evitar conversaciones indeseadas
2) le conferirá un aura de intelectual (procure que no sea un libro vaquero)
3) sentirá usted que posee algo
4) en caso de emergencia siempre puede leerlo.



[...]




3. Hable con desconocidos (salte al consejo cuatro si no es mayor de edad). Los desconocidos son una gran fuente de sabiduría, especialmente si uno los conoce en bares a altas horas de la noche.
[...] En general, los colectivos reaccionan muy bien a las excentricidades, así que es bastante probable que se convierta en alguien popular, amado y respetado, como Ximena Sariñana o Jose Jose. Cuando haya alcanzado ese estatus puede abrir un blog, una cuenta de Instagram o de Twitter. Piense que las mujeres sin tabúes, los machos de verdad e iFilosofía son estrellas en ciernes y que si no puede usted ser popular en la vida real siempre le quedarán las redes sociales. Y recuerde: en Twitter puede ser usted el/la desconocido/a más popular del mundo. Y ES GRATIS.

4. Vaya a todas las reuniones de vecinos y haga propuestas absurdas. Por ejemplo, proponga (enfurecido) que un cura vaya aventando agua bendita en las calles porque se oyen voces y alguna vez hasta ha escuchado claramente el Ave Satanis de Jerry Goldsmith. Añada —murmurando y con la mirada perdida—: «Satán habita en esta comunidad». Mencione en voz muy alta a Carmen Aristeguí si es necesario. Las reuniones de vecinos son muy aburridas, estamos en 2014 y discutir sobre si se debe (o no) pintar la fachada es un auténtico fastidio. Es su hora de innovar y convertir su edificio en un magnifico centro de convenciones.
[... ]

5. Si tiene un amigo baboso, ahora es el momento de dejarlo. Sí, todos tenemos uno de esos: el listillo, el comediante de medio tiempo, el que le guiña el ojo a todo el mundo, el que hace cinco triatlones al mes. Líbrese de él, confíeselo, ya no lo soporta más pero es usted buena persona y tiende a sentirse culpable y a mezclar eso con una extraña concepción de la responsabilidad. Por eso aunque no le llamen, sigue usted llamando, organizando salidas y fingiendo que le hace ilusión. Con un sencillo consejo puede usted empezar a vivir libre de polvo y paja: conviértase en un excéntrico. Cuando quede con su amigo, el baboso, háblele de lo mucho que le preocupa el tráfico de animales y la bajada cualitativa del semen de los monos de Sumatra. Cuando haya más personas presentes sea más discreto, tráigale una copa y dígale al oído: «Esta noche han salido de México mil Quetzales. Se trata de minar su moral, convertirlo en un paranoico. Cuando él, finalmente caíga, finja que no sabe de qué le está hablando. Si lo hace usted bien en tres meses se producirá un cambio de roles: de repente el baboso será usted y tendrá la sartén por el mango.
[...]

6. Invente excusas originales, mienta con elegancia. La verdad está sobrevalorada, todos lo sabemos. El ejemplo más clásico es cuando alguien a quien no le importamos un pito nos dice «¿cómo estás?». La respuesta de cortesía es «bien, gracias». Lo que deberíamos contestarle es «pues mal, ayer discutí con mi pareja, tenemos problemas de dinero, al niño le han agarrado vendiendo heroína en el parque y la niña le ha arrancado los ojos al hámster. ¿Me puedes prestar 5000 pesos?». Y la respuesta auténtica, la verdad: «¿Y a ti qué chingados te importa si no me conoces de nada?».


[...]


7. Vea cine en el cine. A menos que tenga una pantalla de ocho mil pulgadas. Entonces puede quedarse en casa.


8. Dedique más horas al sexo. Lo demás es problema suyo. Nada de niños, ni cadáveres, ni animales. Puede usted mantener relaciones sexuales con muebles si así lo desea. Chupe, huela, pellizque, lama y muerda. Y encienda la luz.

9. Vaya al Banco y pida un préstamo personal de diez millones de pesos. Póngase su mejor traje (si no lo tiene, lo alquila), hágase con un maletín y diríjase al banco más cercano y pregunte por el director. Una vez en su despacho diga que necesita pedir un préstamo personal. El director sacará unos documentos y empezará a tomar notas. «Necesito diez millones de pesos», le soltará usted. Verá como el hombre (o mujer) sufre un cambio sustancial de actitud. Usted aún no lo sabe pero él está valorando qué clase de persona tiene delante. «¿Para qué lo quiere? Putas y cocaína», añadirá antes de que él/ella tenga tiempo de preguntarle. (Si es usted mujer cambie putas por «gigolós» y «cocaína» por «MDMA» ). A partir de aquí los hechos se precipitarán. Él/ella le pedirá que se vaya de su despacho. Usted abrirá el maletín y sacará unos Intervius y dirá que tiene avales. Un señor de seguridad le agarrará por las axilas y es entonces cuando usted abandonará el banco haciendo desmanes y levantando la voz. «¿Y mis putas? ¿Mi cocaína?» (versión femenina: «¿Mis gigolós? ¿mi MDMA?»). Una vez en la calle quéjese de las preferencias, busque el apoyo popular. Qué chingados, reivindíquese: estos ladrones nos han robado eternamente, así que usted quiere señoritas/itos de moral laxa y un par de kilos de droga, que se los den y punto. Eso sí, luego no sea tacaño e invite a los amigos/as, acuérdese también de mí.


10. Piense mal. Si modera usted las expectativas y piensa que todos/as los/as que le rodean son unos completos imbéciles verá que su vida se vuelve especialmente luminosa. Muchos/as le sorprenderán, puede que se enamore, que su vecina se revele como una tipa estupenda, que la cajera del metro le sonría en lugar de mirarle/la con cara de asco (Nota: este comentario debe estudiarse en un contexto humorístico y en ningún modo implica que todas las cajeras de metro miren a todos los clientes con cara de asco —aunque sí a algunos, especialmente los lunes—). Si es usted pesimista y no espera nada de nadie es posible que todo le sorprenda. Si por el contrario prefiere sonreír como un idiota y abrazar hasta a los policias la humanidad le consumirá como las llamas del infierno y acabará en una habitación acolchada hablando con un amigo imaginario llamado Ismael. Desconfíe y sea feliz.